lunes, 22 de diciembre de 2008

...Espita...

La gente humilde, la gente
llena, la gente
sabia.

No hablo de humildad
economica, No, hablo
de humildad de corazon,
de parpados, de sentimientos.

De la que devuelve 63
años despues lo que tu
abuelo le dio a su papa
y ademas... ellos son los
que se sienten agradecidos.

De que aceptes un chocolomo,
una superior, brochetas de carnero
¡se gasto la cerveza! un tequila por favor,
un palco en el tablado.

Sencillamente humanos, campesinos
se llaman ellos mismos, jesucristos
los llamo yo el 21 de diciembre.

Regreso al lugar donde mi
abuelo fue, donde don Candelario
vendia leche, donde mi mama
jugo en su cuna, Julio, el loco
perseguia a mi tio Chino y las
paletas no costaban 2 por 100 pesos.

Nunca habia venido y siento
que todos me conocen, me llaman
doctor, me dicen Ceh y yo solo saludo
como si siempre hubiera vivido
aqui.

No quiero decir que vivir en
el pasado, que vivir en la tecnologia,
el tren ya no funciona, quiero decir vivir.

Simplemente despertar y abrir los ojos
hacia este balcon, respirar el aire puro que las
bicicletas me permiten tener y no preguntarme
¿quien puso en camara lenta la pelicula?

Alguna vez todos quisimos ser
Santos, pero terminamos
exorcisados.

No hay comentarios: