...Mal administrador...

Primero tome
litros y litros de agua,
con mucho chile.

Estaba sentado en el
sillon, simplemente viendo
al techo y comence a tallarme
los ojos, a restregarmelos con
muchisima fuerza, y nada.

Baje las escaleras,
y a proposito me tropece
para caerme y rodar, para
lastimarme.

Una vez abajo, fui al refrigerador
y saque un limom, y lo corte
en dos pedazos, uno para cada
ojo y se los exprimi.

Con el mismo limom
me rasque mi nueva herida
en el dorso de la mano y le puse
un poco de sal, y la remoje en
vinagre.

Subi otra vez
las escaleras donde
me cai, y fui al baño,
me provoque el vomito
y me bañe.

Sali mojado, y sin
secarme, agarre mi cinturon
y me golpee en la espalda
varias, muchas veces, hasta
quedar rojo, y la sangre
comenzaba a salir,
poquito a poco.

Encendi la tele, y vi
telenovelas, los noticieros
y hasta la ranita Demetan,
el comercial de los pollitos
y el de la mama que deja a
su hijo en el kinder.

Como ultimo intento,
adjunte el reproductor de
DVD a la tele y vi, el rey leon,
pero nada sucedia, me rendi
entendi, y me puse a ver a
Woody Allen.

*Al terminar las risas y risas
llegue a la siguiente conclusion:

Creo que todos
tenemos, desde que nacemos,
una dosis determinada de
lagrimas, que las desperdiciamos
en cosas que en su momento
creemos importantes, y yo ya
tuve demasiados momentos como
esos, y ahora que de verdad
necesito llorar, no puedo,
no tengo lagrimas.

Debi saberme administrar.